En todo el mundo, y ante las principales amenazas, los medios independientes han desempeñado un papel crucial en la comunicación de datos sobre COVID-19 que ayudan a prevenir la propagación del virus y proporcionan información crucial sobre lo que debe hacer si está infectado.
Están ayudando a contrarrestar la «desinfodemia» que carcome el asesoramiento de expertos y alimenta la pandemia. Las plataformas de redes sociales, en particular, se han llenado de una avalancha de desinformación y desinformación que se ha extendido tan rápido como el mismo virus.
Esta información errónea puede ser especialmente mortal en países y poblaciones con escaso acceso a información creíble y confiable. En Irán, por ejemplo, el forense nacional reveló que, en poco más de un mes, 728 iraníes habían muerto por beber metanol, bajo la creencia errónea de que proporcionaría inmunidad al virus.
La demanda de información confiable sobre COVID-19 está llevando al público a fuentes de medios creíbles. A su vez, muchas de estas organizaciones están aprovechando la oportunidad de involucrar a estos nuevos lectores y construir lealtades duraderas,(tabascomitierra.com)